Morir de Hambre
Varios periodistas, en distintos medios, han sabido publicar situaciones similares que las sintetizo así:
Lugar: un país de África. Circunstancia: una guerra, tribal y nacional, antigua, mucho armamento, de paz nadie habla ni le interesa. Horario: cerca del mediodía, en un campamento de la Naciones Unidas, en un refugio religioso, ambos precarios, inestables.
El periodista pregunta a una mujer de pocos dientes, muy delgada, con aspecto de 50 años pero apenas tiene 35,según dice.
-¿Tiene hijos?-Dos, están en la guerra. Ahí los mandé.
-Pero, ¿porqué los mandó? Es muy fácil morir en todos lados, y donde están luchando todavía más.
-Por lo menos morirán habiendo comido algo. ¿Usted cree que por acá se viven muchos años? Lo que no matan los soldados lo mata el hambre.
-¿Por qué trajo esos hijos al mundo?
-Yo no los traje. Los trajo Dios. Yo no hice nada. Sé quiénes son los padres, pero no sé cómo se llaman. A una no le preguntan, la agarran y usted sabe lo que nos hacen. Eran de distintos ejércitos.
-¿Cree que volverán?
-¿Para qué? Acá no hay nada. ¿No se fijó? Les dije que no hicieran lo que le hicieron a su madre. Con eso me conformo.
El periodista hace otras preguntas, la mujer se cansa, pide plata, más comida. Después se va. Otro día más.